Por Javier
I. Carbajal

Antes de
iniciar la redacción de un libro
que pretendemos sea un éxito
de ventas, es importante
investigar la idea
sobre la cual vamos a escribir y
conocer si se encuentra entre
aquellos temas con buena salida
en el mercado de libros
digitales. Esto no es imperativo
para escribir un libro, pero sí
definitivamente si deseamos que
nuestro libro se comercialice
con éxito.

¿Quiénes
van a leer tu libro? ¿A
quiénes estás dirigiendo tus
palabras? Es vital que cuentes
con una idea general sobre
quiénes serán tus lectores.
Tómate un tiempo para analizar
tu competencia ¿Existe algún
libro ya publicado que tenga
similitudes con el tuyo? ¿Tu
libro será el único del mercado
en su temática? Si encuentras
similares ¿Qué marcará en tu
libro la diferencia para que la
gente lo elija y lo compre?

Cuando
estés listo para comenzar a
escribir, previamente crea un
esquema de trabajo. Escribe
mentalmente toda la obra, no te
sientes delante del teclado
hasta que no tengas definido
sobre que cosa vas a escribir.
Organiza tus horarios y
prepárate para aislarte -si es
necesario- durante el proceso de
redacción. Realiza toda la
investigación que necesites
antes de comenzar a
escribir. Prepara un esquema
detallado con el argumento
central, la trama y los
personajes. Un esquema es además
un excelente punto de referencia
para auxiliarte cuando te
encuentres escribiendo.
En este instante quiero
advertirte algo: una buena
idea no es suficiente. Por
años nos han vendido la creencia
que una buena idea puede ser el
detonante principal del éxito.
Muchos escritores sueñan con ver
sus libros publicados. Sienten
que tienen una gran idea, pero
ni siquiera han comenzado a
escribir.
Para lograr un libro vendible es
necesario comenzar con un tema.
Un tema que por una razón u otra
genere una importante dosis de
curiosidad y atracción dentro de
un número interesante de
lectores. Tú puedes ser el mejor
escritor del mundo, pero debes
necesariamente considerar la
posibilidad comercial del
producto.
Quiero que
tengas presente esa afirmación,
porque aunque exista poco arte
en ella, es la realidad
cuando queremos vender libros.
Si amas escribir pero tu
intención no es vender, la
situación se simplifica, créeme.
Lo contrario suena muy
romántico: escribir por el
placer de escribir y luego
millones de lectores queriendo
comprar
nuestros libros. Debo confesarte
que eso es una fantasía en la
gran mayoría de casos. Si
quieres intentarlo, estás
invitado a hacerlo. Pero si
aparte de escribir, quieres
comenzar a generar ingresos ya
mismo, tienes que pensar como
escritor y también como
vendedor. Especialmente cuando
se trata de tu primer libro.
Recuerda que sin lectores no
hay libro.

Un consejo que quiero darte si
recién te inicias, es
que comiences trabajando el
primer borrador sin reparar en
errores ortográficos o de
redacción. Tan solo
escribe. La mayoría de
escritores no escriben sus
libros de forma lineal o
cronológica. Escriben y
escriben. Luego tendrás tiempo
para todo lo demás. Mientras
estés en la etapa de borrador,
escribe, escribe y escribe, deja
en el papel todo
lo que llevas dentro.

Una vez
terminas el primer borrador,
comienza la primera lectura y la
tarea de reescribir la obra.
Reescribir es tan importante
como escribir. "Writing is
rewriting" reza un conocido
dicho anglosajón: "Escribir es
reescribir". Leer el borrador te permitirá
acomodar los sucesos en el
tiempo, vincular personajes y
darle al trabajo la fluidez y
consistencia necesarias.
Apoyándote en tu procesador de
texto y tus propios
conocimientos, comienza a
corregir errores ortográficos y
gramaticales, así como la
puntuación.
Una vez hayas culminado esta
etapa, olvídate del material por
una semana o dos. Luego vuelve a
realizar una lectura ¿Qué tal?
¿Encuentras cosas para cambiar?
¿Es necesario agregar o corregir
algo? Éste es el momento.
Una vez terminado el proceso, te
recomiendo que consigas un
corrector profesional para que
realice una lectura del texto.
Adicionalmente puedes entregar
una copia del libro a dos o tres
conocidos para una lectura de
prueba y realicen las
sugerencias que crean
convenientes. No tienes porque
aceptar estas sugerencias, pero
en muchos casos ojos frescos nos
hacen ver cosas que no
lográbamos divisar por nuestra
cuenta.

Realiza una lectura de atrás
hacia adelante del libro para
encontrar otros posibles errores
inadvertidos. Para finalizar,
debes dejar el borrador
definitivo, libre de
errores. Recuerda que en
este momento estás ante la
última oportunidad de cambiar
algo previo a la publicación. Lo
que de aquí resulte será lo que
tus lectores leerán. El formato
de edición dependerá de la
plataforma que hayas
seleccionado para publicar.

Tu libro ya
se encuentra listo para ser
publicado y promocionado en la
plataforma que hayas decidido.
Por supuesto puedes repetir el
proceso y utilizarlo como modelo
para el lanzamiento de tus
siguientes publicaciones.
Te espero
en mi siguiente artículo.


Javier Carbajal
¿Y tú que opinas de todo esto?
|